Dos prisioneros de Sobibor, Alexander Peczorski y Leon Feldhendler, planificaron un levantamiento en 1943. El 14 de octubre, los prisioneros asesinaron a once guardias e iniciaron un incendio en el campo. Unos 300 prisioneros escaparon, pero muchos fueron asesinados durante la cacería que se les hizo posteriormente. Al final de la guerra, cincuenta de ellos habían logrado sobrevivir.